Una de las ventajas de vivir en el campo es tener tu propia materia prima. Nunca lo había señalado aquí pero la mayoría de las verduras salen del huerto de mi suegra donde buenamente colaboro. Ahora bien, tiene un curro... aunque es cierto que el trabajo es en primavera, luego te limitas a recoger. Tenemos de todo: patatas, brócoli, coliflor, puerro, apio, zanahoria, cebolla y unos cuantos etcéteras... Y también ¡un cerezo! Lo malo de esto es que va por temporadas claro, de repente tienen cerezas hasta en la sopa y luego se acabó. Hay que congelar (se congelan sin hueso) y hacer mermeladas. Otro día os enseñaré el huerto que está de foto. Además así instruyo a los urbanitas que como yo antes no saben de dónde vienen las cosas...
Esta receta de pastel es lo más típico aquí, lo hacen de todo: de queso (ya lo hemos hecho), verduras, y de todo tipo de frutas. La base es masa quebrada dulce o salada. En este caso os traigo de cerezas, pero cuando haga de otro tipo os los colgaré también al final de esta entrada (se hacen todos igual). En alemán se llaman "fladen" y éste en concreto es "kirschenfladen".
La materia prima:
Ingredientes: Una lámina de masa quebrada dulce (ver en Crostata de mermelada de junio de 2011), pero no es necesario echar tanta azúcar, con 50 gramos es suficiente. Avellana molida u otro tipo de fruto seco (no sé si se vende esto así en España), 100 ml de nata y 100 de leche o 200 de leche o de nata (al gusto y a las calorías que se quiera), un huevo , 3 cucharadas de azúcar (o fructosa), una cucharada de maicena, esencia natural de vainilla o azúcar avainillada o una vaina de vainilla (se cuece con la leche y luego se deja enfriar). Entre medio y un kilo de cerezas (o cualquier otra fruta, melocotón, albaricoque, manzana, pera...). Yo tengo una máquina suiza más vieja que mi casa que quita los huesos de las cerezas, si no hay que tener más paciencia...
Lo primero es precalentar el horno a 220 grados y tener preparada la masa quebrada.Como va a ser líquida hay que meterla sola en el horno tapado con albal y un peso como garbanzos unos 15 minutos. (ver en la entrada masa quebrada salada de mayo de 2011)
Cubrimos el fondo con el fruto seco.
Después mezclamos la maicena con la nata y removemos bien, añadimos el huevo, la vainilla (si es una vaina se habrá cocido con la leche), el azúcar y el resto de la leche.
Encima de las avellanas o lo que sea se coloca la fruta.
Cubrimos con la mezcla de leche y huevo.
Metemos en el horno a 220º unos 25 minutos pero vamos comprobando para que no se queme. Tiene que cuajarse y dorarse un poco el borde.
¡Y aquí está! Los suizos se la comen de cena, para mí es raro porque es dulce, pero ya me he acostumbrado...
Añadido el 13 de Julio:
Pastel de albaricoque:
Ya os dije que había miles de versiones con cualquier fruta, una de las más comunes es de albaricoque. He utilizado medio kilo más o menos, pero hay que decir que mi molde es pequeño. Se hace exactamente igual que la anterior así que sólo os pongo la foto del resultado final.
Añadido el 25 de Septiembre:
Pastel de ciruelas:
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